«Entró en la sinagoga, como era su costumbre hacerlo los sábados, y se levantó para hacer la lectura»
Meditando el evangelio dominical con los niños.
Hola, que gusto saludarte por aquí 😊. Hoy en nuestro tercer domingo del tiempo ordinario, la liturgia nos recuerda el momento en que Jesús va a la sinagoga de Nazareth y se toca de leer una lectura que a todos dejó “con la boca abierta”. ¿Recuerdas que lectura fue?
Te animo a que, si decides realizar la reflexión del evangelio con tus niños, te tomes el tiempo suficiente para meditar el evangelio que vas a enseñar (Lucas 1, 1-4; 4, 14-21.). Entra en oración y pide la luz del Espíritu Santo, para que, por medio de su sabiduría, logres guiar a los niños a que descubran su mensaje.
PROPÓSITO: RECONOCER LO MUCHO QUE A JESÚS LE GUSTA HABLAR DE LA PALABRA DE DIOS Y CONOCER LA IMPORTANCIA DE LEERLA COMO PARTE DE NUESTRO DÍA A DÍA.
*Juego – “¿A quién le tocará leer?”
Materiales:
- Papelitos con adivinanzas distintas (envueltas como pergaminos) y una caja donde poner los papelitos y revolverlos. Una pelota y música.
Desarrollo:
- El propósito de esta actividad tiene como fin introducir a los niños al momento en que Jesús lee la palabra en la sinagoga.
- Pide a los niños que se sienten en el suelo formando un círculo.
- El juego consiste en ir pasando la pelota de mano en mano. Solo pueden ir pasando la pelota mientras se escucha la música.
- El niño que se quede con la pelota cuando la música deje de sonar, deberá ponerse de pie y leer una adivinanza. El mismo niño deberá de responder.
- Jueguen hasta que todas las adivinanzas hayan salido.
NOTA: SI LOS NIÑOS SON MUY PEQUEÑOS PUEDES PONER EN LOS PAPELES PALABRAS CORTAS Y/O DIBUJOS.
Reflexión del evangelio:
¿Te gustó el juego? ¿Qué tenías que hacer? Un día, así como a ti, a Jesús le tocó pasar al frente a leer. Estaba en una sinagoga y todos quedaron muy sorprendidos con lo que dijo ¿Sabes qué lugar es ese? ¿Te imaginas que pudo haber leído? ¿Quién lo escuchó? Si quieres saber las respuestas a estas preguntas, prepara tu corazón y disponte a escuchar con atención lo que nuestro amigo Jesús nos quiere platicar hoy.
Es momento de introducir el evangelio dominical, AQUÍ te dejo una opción de cómo puedes introducir el evangelio. Te animo a que puedas hacer ademanes exagerados, mímica y gesticulaciones que llamen la atención de los niños, así como preguntas durante el evangelio, para así seguir manteniendo la atención.
Hoy vemos como a Jesús le encantaba ir a su iglesia y hablarle de Dios a todos los demás para enseñarles todo lo que Él sabía. Pero ese día le tocó hacer algo muy importante: LEER. Pero no leyó cualquier cosa, sino que leyó la palabra de Dios. Antes no había libros y toda la biblia la tenían escrita en rollitos, así como los que nosotros usamos hoy en el juego, por eso en el evangelio, dice que se paró y desenvolvió el volumen para poder leerlo. Hoy en día tenemos la facilidad de que TODA la palabra de Dios está unida en un solo libro: LA BIBLIA.
¿Por qué crees que todos se quedaron sorprendidos por lo que leyó Jesús? Jesús estaba leyendo la misión que Dios le otorgó: llevar a los pobres la buena nueva, para anunciar la liberación a los cautivos y la curación a los ciegos, para dar libertad a los oprimidos y proclamar el año de gracia del Señor. Todos quedaron fascinados por lo que estaban escuchando, Jesús es el ungido de Dios, que vino a liberarnos del pecado y llevarnos a los brazos amorosos de nuestro Padre Bueno.
Dinámica – *El regalo de Dios*
Material:
- Una biblia envuelta como regalo.
Desarrollo de la actividad:
- Previamente envuelve la biblia con papel de regalo, si puedes ponle un moño para que se vea mas vistoso.
- Acomoda los niños en círculo y coloca el regalo en medio de ellos, diles que es un regalo que Dios nos ha dejado a todos y pregúntales que si se imaginan que puede ser.
- Abre el regalo o pide a alguien que lo abra.
- Explica a los niños que Dios nos ha regalado muchas cosas porque nos ama mucho y una de las cosas que nos ha regalo es la Biblia. La Biblia es como una carta de Dios para todos pues ahí podemos encontrar cosas que Dios nos quiere decir, por ello es importante que leamos para conocer lo que Él nos quiere decir.
Reflexión final y cierre
A Jesús le encantaba enseñar, hablar y leer de su Padre Dios, así también quiere invitarnos a nosotros a hacer lo mismo, a seguir aprendiendo de Él y leer las cosas impresionantes que nos ha dejado en su Palabra.
Al terminar, cierra con una pequeña oración:
“Amigo Jesús, te damos las gracias por enseñarnos que por medio de la Biblia podemos escuchar lo que Dios nos quiere decir, ayúdanos a seguir aprendiendo y conocerlo más a través de su Palabra. Amén”
Y que todo sea para la gloria del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén 😊
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¡Bendecido domingo!